En 1499, sale de Cádiz (18 ó 20 may) la expedición dirigida por Alonso de Ojeda (que ha capitulado con los reyes sin permiso de Colón), con Juan de la Cosa (su tercer viaje al Nuevo Mundo, como piloto mayor y cartógrafo) y el florentino Américo Vespucio, compuesta por 4 naves, que descubre y explora la costa de las Guayanas (hoy
Surinam y
Guyana), sin riqueza mineral y poblada por fieros caribes. Al tocar la Guyana Vespucio se separa para dirigirse al SE por lo que algunos suponen que descubrió
Brasil y llegó hasta el cabo San Agustín, descubriendo de paso la desembocadura del Amazonas. Ojeda descubre el delta del Orinoco y explora también el golfo de Paria, donde es recibido y honrado por los indios. Explora las islas de Trinidad y Margarita y descubre las de Los Frailes, La Tortuga (a la que llama así por las numerosas tortugas), de los Gigantes (hoy
Curaçao, donde desembarca),
Bonaire y
Aruba (que reclama para Castilla), tal vez ya descubierta, y en lo que ya se denomina “Tierra Firme”, descubre el lago de Maracaibo (24 ago), donde los poblados lacustres motivan el nombre de
Venezuela (Pequeña Venecia) que da Vespucio al país; después Ojeda es el 1º en descubrir territorio de la actual
Colombia al doblar el cabo que llama de Coquibacoa (hoy de la Vela)(ago), pero las intensas luchas con los indios acaban por decidirle a regresar a pesar del escaso negocio (algunas perlas obtenidas en Paria, algo de oro y varios esclavos), deteniéndose antes en Santo Domingo (5 set), de donde es expulsado por las carabelas de Francisco Roldán, enviado por Cristóbal Colón (con el que ha pactado), para dirigirse seguidamente a Xaraguá (S de
Haití), donde reaviva la rebelión que Colón aplasta con sangre; por último, zarpa (15 oct) de regreso a Cádiz, donde venderá los 222 esclavos que llevaba consigo.
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