La marea inmigrante que ya es un tsunami

Enrique López Bermejo.-

Segun el Instituto Nacional de Estadistica, en el primer semestre de este año infausto han entrado en España un mínimo de 178.000 nuevos inmigrantes. De seguir así y sin contar los que “escapan” a esta estadística, que no serán pocos, terminaremos el año con 350.000 invasores mas. !350.000 bocas más que alimentar, que dar asistencia sanitaria, educativa y social..! Eramos pocos… Y el PP mirando para otro lado, sin querer enterarse del drama que esto supone para los españoles autóctonos.
Pos desgracia éste sigue siendo el quid del asunto. Ni crisis, ni rescate que no llega, ni recorte de derechos a los españoles. Ni 25% de paro. España sigue siendo un imán para todos los inmigrantes. Saben que aquí van a comer, que con el hombre blanco siempre se come, que el hombre blanco trabaja como un blanco para que tu puedas vivir sin hacer nada productivo. Saben que aquí las leyes son laxas, que se entra con facilidad y que aunque te cojan es muy difícil que te devuelvan a tu país de origen. Entre otras cosas porque el Estado dice no tener dinero para pagarles el billete de vuelta. Saben que aquí existe una legión de ONG y asociaciones buenistas, afiliadas al presupuesto, que velan día y noche para que nadie te toque un pelo, para que tengan muchos derechos y ningún deber, para que si delinques puedas estar en la calle a los pocos días o a las pocas horas. Basta que un Policía Local le pida la documentación a un ‘top manta’ nigeriano para que el asunto a pese a tener trascendencia internacional. Esto está así montado por la democracia liberal española.
Esta facilidad de entrada, este laxismo suicida, este buenismo con el extranjero que busca aprovecharse de nuestros ya escasos bienes, es el mejor “efecto llamada” para que todos los que quieran entrar en Europa se queden en la mísera y arruinada España. Nuestras desprotegidas y porosas fronteras son ya un coladero de inmigrantes. Las autoridades policiales no pueden hacer nada para detener esta invasión consentida. Segun reconocen oficialmente las instancias europeas, “España es el país donde entran más ilegales anualmente”.
Según FRONTEX, en el año 2008, justo cuando comenzó la crisis, en España entraron 464.262 inmigrantes. Por contra, en Francia lo hicieron 62.267 y en la próspera (entonces y ahora) Alemania, 4.761. Es decir, el uno por ciento de los que entraron en España.
Ahora, tras cuatro años de ruina y decadencia, los datos siguen siendo prácticamente los mismos. Sigue la marea. Lo que cambia es que ahora los del PP callan y transigen. Cuando estaban en la oposición ponían el grito en el cielo ante esta invasión institucionalizada. Ahora se dedican a “tocar la lira” mientras España arde por sus cuatro costados.
La España arruinada por el “zapaterismo” y rematada por el “marianismo”, está cada día más al borde del abismo. Cuando un Estado importa chusma y, por contra, deja escapar a sus mejores talentos (sólo en Málaga se marchan cada mes al extranjero 200 licenciados universitarios), ese Estado se está cavando su propia tumba. Y a la tumba vamos directamente, sólo que con 400.000 invasores más a final de año.