Al nuevo “Ghandhi”, según él claro ésta, Juan Manuel Sánchez Gordillo, no le gusta pasar desapercibido. A parte de ser Alcalde de su pueblo Marinaleda y parlamentario andaluz, con cierto poder político por el pacto de gobierno de socialistas y comunistas en ésta Comunidad, le gusta el autobombo, con cierta dosis, muchísima digo yo, de narcisísmo, prepotencia y egocentrismo.
Le gusta ser el centro de atención sea por lo que sea, y si es por su «altruismo», del que no se cansa de presumir, más aún. El “ Robin Hood” de Marinaleda, aunque a él le gusta más que le comparen con Gandhi, Juan Manuel Sánchez Gordillo, aprovecha cualquier ocasión para alardear del dinero que dona. Pero claro, con un sueldo de diputado de 3.113,26 euros al mes, le da más que de sobra. Así, entrega mil euros cada mes a IU y otro tanto a entidades no gubernamentales. Al final se queda con 1.200 euros al mes… o eso dice.
Este ciudadano, quiere abanderar la revolución pendiente y ser el banderín de enganche de las protestas lógicas de nuestros compatriotas contra los recortes, fin justificable, pero no los medios que utiliza. Se equivoca asaltando supermercados o allanando hoteles de lujo, o fincas-cortijos de propietarios famosos.
Alcalde de Marinaleda (Sevilla) por IU desde 1979 y diputado autonómico, Juan Manuel Sánchez Gordillo lleva semanas acaparando los medios de comunicación y defendiendo que sus acciones son formas pacíficas de protestar para defender “al pueblo”, versión con la que discrepan la mayoría de los jueces y fiscales, que las califican de delito. Así para la Asociación Profesional de la Magistratura (APM), el Foro Judicial Independiente (FJI), la Asociación de Fiscales (AF) y la Unión Progresista de Fiscales (UPF) es “claro” que puede haber robo con violencia y coacciones; y para el portavoz de la APM, Pablo Llarena, ha dicho que llevarse comida de un supermercado “sin el consentimiento de su dueño y desplegando violencia”, ya que de no haberse ejercido los empleados lo hubieran impedido, “tiene una calificación clara” en el Código Penal y es delito de robo con violencia. Igual opinión tiene el presidente del FJI, Ángel Dolado, para quien los asaltos fueron un “delito claro” de robo con fuerza o intimidación, y no se produjo hurto famélico -cuando se roba para comer-, delito que está exento de pena.
En esto de la justicia, como por lo visto en todas las facetas de ésta vida, también hay ciudadanos de primera y de segunda; pues el alcalde de Marinaleda, al tener el privilegio de una casta política totalmente desacreditada en nuestro país, se quiere aprovechar de ser aforado. Pero ya han salido voces de la magistratura haciendo saber al resto de los mortales que es un ciudadano que también “está sometido a la ley”. Cosa que al Sr.Alcalde le debe importar un bledo, y más cuando voces autorizadas le han recordado que nuestro ordenamiento jurídico “no tolera” esas sustracciones con la disculpa de que es para dar de comer a otros, y no es justificable que los que se llevaron los carros de comida lo hicieron como “crítica política” y de forma “puntual”., siendo un “enorme fraude fiscal que está provocando graves perjuicios para la economía nacional”, pero se pude esperar más de éste sujeto, a parte de “su” solidaridad mal entendida, como es la invitación por grupos filo-terroristas extranjeros, o en nuestro país apoyando a los grupos afines a los asesinos etarras. Gentuza como los de Negu Gorriak, han sido invitados a Marinaleda financiados por su estalinista ayuntamiento. También grupos como Soziedad Alkohólika o los italianos Banda Bassotti.
Si pasamos al tema económico del ayuntamiento sevillano de Marinaleda, las cifras cantan. El 70% de los “supuestos” trabajadores de Marinaleda cobran el PER, debido al “chantaje” que desde la época de Felipe González, no sin demasiados requisitos, se aprovechan sus vecinos. Quizás por eso, en vez de trabajar, se van con su alcalde a asaltar supermercados, fincas, bancos y todo lo que se les ponga por delante. Hay que recordar, que para cobrar el PER, sólo necesitan que las peonadas las firme el alcalde, todos se benefician, el alcalde para que les sigan votando, y así lleva gobernando, a su manera, unos cuarenta años su “cortijo de Marinaleda”. Por cierto, pueblo que visite por curiosidad, hace un par de años, cuando con José Luis Roberto inaguramos la sede de Los Palacios-Villafranca de E-2000 al estar a muy pocos klmtros. uno del otro..
La Junta de Andalucía, le ha regalado en los últimos ochos meses al Sindicato de Obreros del Campo (SOC), encuadrado en el Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), más de medio de millón de euros en ayudas públicas dirigidas a distintos fines. La última asignación ascendió a 80.822,91 euros, según resolvió la Dirección General de Formación Profesional, Autónomos y Programas para el Empleo de la consejería del ramo el pasado 2 de mayo.
Tal y como consta en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) del 24 de dicho mes, esta subvención persigue el “fomento” del acceso a un puesto de trabajo. Las concesiones inmediatamente anteriores se remontan al 21 de marzo, cuando la misma dirección general destinó tres partidas al SOC. La primera, que asciende 26.235 euros, está dirigida a la prestación de cursos de formación y a la inserción laboral de discapacitados e inmigrantes; la segunda, cuyo importe es el más alto de las cantidades otorgadas en lo que va de año, elevándose a los 370.320 euros, contempla el mismo propósito pero los principales beneficiarios son, en este caso, jóvenes desempleados. La tercera subvención alcanza los 29.812,50 euros y se centro, por su parte, en personas mayores de 45 años con especiales dificultades para conseguir un trabajo y un sueldo mensual que llevar a éstos desprotegidos.
También el departamento de Salud y Bienestar Social premió al sindicato del alcalde saqueador con otras tres subvenciones en febrero: una, de 5.879,67 euros para el programa “Jubilación y Participación II”; otra, de 6.443 euros para la “atención y asesoramiento en materia laboral y social a trabajadores inmigrantes”; y una última, de 3.000 euros, que aprueba la Dirección General de Coordinación de Políticas Migratorias y otorga a un “servicio de asesoramiento y mediación laboral”.
Todo éstos datos económicos sin contar con que el Ayuntamiento de Marinaleda aún no ha invertido ni un solo euro en la construcción de 25 viviendas planificadas en su municipio y que contaban con una subvención del Gobierno andaluz de 826.000 euros repartidas en tres anualidades. En 2010, la Junta de Andalucía concedió a Marinaleda 200.000 euros, pero el equipo de Juan Manuel Sánchez Gordillo todavía no ha empezado a desarrollar ni siquiera la primera parte del proyecto. Las cantidades son imponentes si tenemos en cuenta que Marinaleda no alcanza ni los tres mil habitantes. Las viviendas, en régimen de autoconstrucción, tenían una subvención prevista de 419.500 euros en 2011, mientras que la tercera anualidad, correspondiente a 2012, se elevaba a 206.500 euros.
El plazo para ejecutar la obra alcanzaba los 18 meses, según figura en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía del 4 de noviembre de 2010 (número 215). El vencimiento fue el pasado mes de junio. Si a esta marea de euros sumamos las subvenciones que el SOC haya recibido del Gobierno central, la cifra que podemos obtener es más que importante Como el Sindicato de Obreros del Campo es Sánchez Gordillo y su cuadrilla de bandoleros, y el Ayuntamiento de Marinaleda (que recoge sus impuestos y también recibe otras jugosas subvenciones) está formado también por él, más parientes y amiguitos, parece evidente que la revolución llamada Sánchez Gordillo se nutre, como todo en España, de los bolsillos de todos los españoles.
¡Para salir corriendo y no parar hasta las antípodas…!, y parafraseando las palabras de otro ilustre político del partido que nos gobierna, que ha manifestado “que se exiliaría si Sánchez Gordillo fuera Presidente del Gobierno”; a lo que debería dirigirse también a sus correligionarios para que gestionen ésta crisis de otra manera, que para eso obtuvo el concurso del pueblo español de forma mayorítaria, en vez de ahondarnos más en la misma, y dejarse de justificaciones y hacer guerras políticas.
En ésta semana comunica la prensa que “la romería” de Marinaleda, con su Alcalde a la cabeza, llega a Granada, esperamos a ver que tratan de saquear o a quién molestar. La desgraciada España en general, por la crisis total que padecemos, incluida ésta anécdota del nuevo “Robín Hood”, acabas sintiendo más desprecio por el cómplice pasivo imbécil y cobarde que por el nuevo “Ghandhi” andaluz, que hace su papel