“(…) la garantía más grande de corrupción y de equívoco pegajoso y abominable, es la democracia que todo lo aplasta. Es por esto que José Antonio Primo de Rivera se había sublevado contra el principio democrático y se había instaurado en su cerebro unos regímenes que garantizaban mucho más la libertad de cada individuo (…)”.
Salvador Dalí en Las pasiones según Dalí
No hay comentarios:
Publicar un comentario