La Policía española ha renovado el listado de los miembros de ETA más buscados con cinco nuevos rostros y dos viejos conocidos de la organización que, hasta ahora, no estaban en esta lista. Se trata de Iñaki de Juana Chaos y José Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera, ambos fugados de la justicia, que han pasado a engrosar la primera modificación de la lista desde que los activistas declararan el cese definitivo de la violencia en octubre del pasado año. La Guardia Civil y la Ertzain-tza sí habían renovado ya sus respectivas listas en varias ocasiones a lo largo de los últimos meses.
Josu Ternera, número uno de ETA en los años ochenta y parlamentario vasco a finales de los noventa, huyó en noviembre de 2003 al ser imputado por el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza en 1987, en el que murieron once personas, entre ellas cinco niños. Según el proceso, Urrutikoetxea era el jefe de ETA que ordenó la acción. Poco después de su fuga, Ternera fue incluido en la lista de los más buscados de Interpol. De Juana Chaos, exmiembro del comando Madrid de ETA, y autor de una veintena de asesinatos, salió de prisión en 2008 tras una larga huelga de hambre por la que tuvo que ser ingresado en el hospital. Tras quedar en libertad, pasó a Irlanda, aunque en la actualidad se encuentra en paradero desconocido. El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco lo reclama por un presunto delito de enaltecimiento del terrorismo.
Los otros cinco nuevos rostros de la lista, algunos de ellos con un amplio historial en la izquierda abertzale o en actos de kale borroka, son Igor Uriarte López de Vicuña, Andoni Lariz Bustinduy, Miren Nekane Txapartegi, Mikel Barrios Santamaría y Sabin Mendizabal Plazaola. Fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por Efe consideran que los cinco podrían integrar ahora algunas de las “diezmadas” estructuras de la organización en la clandestinidad que se mantendrían en estado latente desde el anuncio de cese definitivo de la actividad armada del 20 de octubre de 2011.
Entre todos ellos destacaría el nombre de Miren Nekane Txapartegi, que fue detenida el 9 de marzo de 1999 en Tolosa acusada de ser el enlace entre los comandos de ETA en el Estado y el dirigente José Javier Arizkuren Ruiz, Kantauri, detenido ese mismo día en París. En el momento de su arresto era concejal de HB en Asteasu. En septiembre de 2000, el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón la procesó por pertenencia a organización armada como miembro del aparato internacional de ETA, y dentro del sumario 18/98 contra varias organizaciones.
El 19 de diciembre de 2007, el tribunal la condenó a once años de prisión, condena que el Supremo rebajó a seis años y nueve meses de cárcel. Permanece huida desde la emisión de la sentencia.
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